13/02/2023

La fábula del rey del bosque

Dios implantó nuestras pasiones y nuestros frutos; en consecuencia, si somos olivos, produzcamos aceite; si somos higueras, demos higos; y si somos vid, generemos uvas. Nuestra singularidad y nuestros dones deben definir nuestro camino. Sin embargo, para muchos de nosotros la ambición de querer tener una corona que no es nuestra, puede llevarnos a perder lo único que teníamos de bueno. El delirio de ser algo que no somos, puede hacernos perder nuestro propósito. No olvidemos que cuando vivimos según el equipaje que Dios nos dio, ¡vivimos la vida llena de gozo!